Los maestros están más sanos cuando aprenden, además de enseñar
Un estudio halla una fuerte correlación entre el aprendizaje, el desarrollo personal y la salud
Diversos estudios ya habían indicado que existe un vínculo entre el aprendizaje y la salud. Ahora, una nueva investigación, realizada por científicos suecos, ha revelado que el aprendizaje puede tener un efecto positivo en la salud de los maestros de escuela. Si estos, además de enseñar, aprenden y se desarrollan en su trabajo, conseguirán que este tenga un efecto positivo en su bienestar.
Diversos estudios han indicado que existe un vínculo entre el aprendizaje y la salud. Por ejemplo, en 2010, un estudio de la Universidad de California en Irvine (EEUU) reveló que el aprendizaje potencia la salud del cerebro
Ahora, una nueva investigación, realizada por científicos de la Universidad West y de la Universidad Linnaeus -ambas en Suecia- ha revelado que el aprendizaje puede tener un efecto más general en la salud. Concretamente, en la salud de los maestros de escuela.
El estudio fue realizado con una muestra aleatoria de 229 profesores de 20 escuelas de la provincia sueca de Västra Götaland. Todos ellos respondieron a un cuestionario, que incluyó mediciones sobre su salud, su capacitación y su trabajo, con aprendizaje integrado. Los datos resultantes mostraron una correlación estadística altamente significativa entre dichas mediciones.
Más concretamente, mostraron que, para tener un buen estado de salud, los maestros no necesitan solo enseñar, sino también deben aprender y desarrollarse, informa la Universidad Linnaeus en un comunicado difundido por AlphaGalileo.
El estudio fue realizado con una muestra aleatoria de 229 profesores de 20 escuelas de la provincia sueca de Västra Götaland. Todos ellos respondieron a un cuestionario, que incluyó mediciones sobre su salud, su capacitación y su trabajo, con aprendizaje integrado. Los datos resultantes mostraron una correlación estadística altamente significativa entre dichas mediciones.
Más concretamente, mostraron que, para tener un buen estado de salud, los maestros no necesitan solo enseñar, sino también deben aprender y desarrollarse, informa la Universidad Linnaeus en un comunicado difundido por AlphaGalileo.
Aumentar la fluidez
Un estado pleno de aprendizaje se caracterizaría por una 'sensación de fluidez'. Esta ha sido descrita por los investigadores como el "estado de inmersión completa en una actividad", de manera totalmente efectiva y que, al mismo tiempo, produzca "un enorme disfrute".
En el presente estudio, se probó la relación entre una medida de ese "estado de fluidez" y la salud de los maestros. Se constató así la existencia de una fuerte correlación entre ambos factores.
Según Yvonne Lagrosen, investigadora de la Universidad West y coautora del análisis, la correlación podría tener su origen en que la 'sensación de fluidez' hace que la carga de trabajo se perciba como más leve.
En otras palabras, que si los maestros disfrutan de su trabajo hasta el punto de quedar completamente absorbidos por él, tendrán más posibilidades de que su labor influya positivamente en su salud.
A pesar de que los investigadores reconocen que su estudio solo ha sido llevado a cabo en escuelas -por lo que, dicen, las posibilidades de generalizar sus resultados a otros sectores son inciertas-, señalan los resultados obtenidos indican que, para estar sanos, es bueno aprender y desarrollarse constantemente, tanto en la profesión como en la vida.
En términos generales, la salud es uno de los aspectos más importantes de la vida. La mayoría de la gente define su calidad de vida en términos de independencia, seguridad, armonía, relaciones humanas y una buena salud. Sin embargo, a menudo, los factores laborales tienen un impacto negativo en la salud de los trabajadores. Se ha calculado que la mayoría de los trabajadores europeos experimentan al menos un problema de salud al año relacionado con su trabajo.
Un estado pleno de aprendizaje se caracterizaría por una 'sensación de fluidez'. Esta ha sido descrita por los investigadores como el "estado de inmersión completa en una actividad", de manera totalmente efectiva y que, al mismo tiempo, produzca "un enorme disfrute".
En el presente estudio, se probó la relación entre una medida de ese "estado de fluidez" y la salud de los maestros. Se constató así la existencia de una fuerte correlación entre ambos factores.
Según Yvonne Lagrosen, investigadora de la Universidad West y coautora del análisis, la correlación podría tener su origen en que la 'sensación de fluidez' hace que la carga de trabajo se perciba como más leve.
En otras palabras, que si los maestros disfrutan de su trabajo hasta el punto de quedar completamente absorbidos por él, tendrán más posibilidades de que su labor influya positivamente en su salud.
A pesar de que los investigadores reconocen que su estudio solo ha sido llevado a cabo en escuelas -por lo que, dicen, las posibilidades de generalizar sus resultados a otros sectores son inciertas-, señalan los resultados obtenidos indican que, para estar sanos, es bueno aprender y desarrollarse constantemente, tanto en la profesión como en la vida.
En términos generales, la salud es uno de los aspectos más importantes de la vida. La mayoría de la gente define su calidad de vida en términos de independencia, seguridad, armonía, relaciones humanas y una buena salud. Sin embargo, a menudo, los factores laborales tienen un impacto negativo en la salud de los trabajadores. Se ha calculado que la mayoría de los trabajadores europeos experimentan al menos un problema de salud al año relacionado con su trabajo.
Referencia bibliográfica:
Stefan Lagrosen, Yvonne Lagrose. Work integrated learning for employee health in school. International Journal of Quality and Service Science (2014). DOI: 10.1108/IJQSS-09-2012-0015.
Stefan Lagrosen, Yvonne Lagrose. Work integrated learning for employee health in school. International Journal of Quality and Service Science (2014). DOI: 10.1108/IJQSS-09-2012-0015.