En este vídeo, la psicóloga Begoña Ibarrola explica la importancia de las emociones en el aprendizaje. "Las emociones influyen en el que aprende y en el que enseña", señala la experta. Ibarrola desgrana con naturalidad y una gran capacidad didáctica aquellas emociones que propician o dificultan el aprendizaje. ¿Es más fácil aprender en entornos tranquilos? ¿Cómo afecta la envidia en la capacidad de atención? Según Ibarrola es importante que el profesorado comprenda cuáles son los estados emocionales favorables para aprender. Así, asegura, "podrán generar entornos de aula emocionalmente saludables".
Begoña Ibarrola es licenciada en Psicología por la Universidad Complutense de Madrid. Es pionera de la musicoterapia en España y experta en inteligencia emocional. Ejerció como terapeuta infantil durante quince años y descubrió el poder de las historias como herramienta para la educación emocional. Ha escrito más de doscientos cuentos que han sido traducidos a una decena de idiomas. Es autora de las antologías ‘Cuentos para educar niños felices’, ‘Cuentos para aprender a convivir’ o de la colección ilustrada ‘Cuentos para sentir’. Hoy está volcada en la escritura, la docencia y la investigación.Ph.D. JUAN DIEGO GÓMEZ-ESCALONILLA TORRIJOS. Maestro y Psicopedagogo doctorado en Neuroeducación. Ponente y evaluador premios Espiral. ¡Seguimos adelante con NEEvolución!
Páginas
- PRESENTACIÓN
- MATERIAL TIC
- APRENDIZAJE
- MOTIVACIÓN Y LA NEUROEDUCACIÓN
- LANGUAGES & LEARNING
- REVISTAS
- ENGLISH & LITERACY
- EDUCATIONAL RESOURCES IN ENGLISH
- DIDÁCTICA
- ARTS & SCIENCE
- NORMATIVA EDUCATIVA
- ORIENTACION
- MY PAPERS
- DigComp
- DigCont
- TUTORIALES TICs
- PICTURES & MUSIC
- CONTENIDOS EF
- LOE-LOMLOE
- COGNITIVE AND PHYSICAL HEALTH PAPERS
- LECTOESCRITURA
- ORAL COMMUNICATION
- SALUD/HEALTH
martes, 18 de mayo de 2021
sábado, 8 de mayo de 2021
lunes, 3 de mayo de 2021
Quizá la felicidad no está donde la buscas
Un error que cometemos es el de asociar el logro de ciertas aspiraciones con encontrar la felicidad: “seré feliz cuando cambie de trabajo”, “seré feliz cuando tenga una pareja”, “seré feliz cuando consiga el divorcio”, “seré feliz cuando tenga mi propia casa”. Pero es que cuando por fin conseguimos alguna de estas metas, va y resulta que la felicidad no llega. Que sí, que nos sentimos bien por haber conseguido eso que queríamos, pero esa sensación positiva desaparece muy rápido, para volver otra vez a la casilla de salida, y eso es muy frustrante.
Así van pasando los días y no llegamos a darnos cuenta que, en realidad, vivimos como ratones en la rueda, corriendo mucho pero sin llegar a ningún lado, porque nada más llegar nos hemos marcado la siguiente meta sin poder parar ni un segundo a disfrutar eso que tanto nos ha costado conseguir.The science of analyzing conversations, second by second | Elizabeth Stokoe | TEDxBermuda
Stokoe developed the Conversation Analytic Role-play Method (CARM), an approach based on evidence about what sorts of problems and roadblocks can occur in conversation, as well as the techniques and strategies that best resolve these problems.[2] CARM won Loughborough University's Social Enterprise award (2013).
El efecto Forer: así pueden descubrir tu auténtica personalidad
Hoy vamos a hablar sobre el Efecto Forer, que muestra cómo las personas tendemos a aceptar descripciones personales vagas como excepcionalmente aplicables a nosotros mismos, sin darnos cuenta que realmente son tan genéricas que podrían ser aplicadas a cualquiera. Este efecto explica en parte por qué tanta gente está convencida de que las pseudociencias y pseudoterapias funcionan: astrología, eneagramas, grafología, biorritmos, quiromancia, cartomancia, adivinación… Muchas personas que acuden a estos “servicios” salen sorprendidos de la exactitud con la que logran comprenderles y desvelar “su verdadero ser”, lo cual es la puerta de entrada para un largo tratamiento basado en esa evaluación. Pero en realidad esta gente no hace otra cosa que aplicar, entre otras cosas, lo que Forer demostró hace casi un siglo.
El Síndrome del Impostor
Muchas personas, sin saberlo, experimentan lo que se conoce como el “síndrome del impostor”. Son personas que, a pesar de tener una carrera profesional exitosa, logros académicos, elogios y reconocimiento a raudales… se sienten como impostores. Creen que todo lo que han logrado ha sido más bien debido a golpes de suerte o a otros factores externos a ellos, y no algo tan relacionado con una buena capacidad o aptitudes. Y viven con el miedo constante a que llegue el momento en el que “se destape el pastel” y todo el mundo descubra que no son más que un gran fraude.
Por qué los INCOMPETENTES desconocen que lo son: el efecto DUNING KRUGER
Probablemente ya os habréis dado cuenta: las personas que son menos competentes o hábiles en una determinada área de conocimiento suelen estimar (y mucho) a la alza sus capacidades, hasta el punto que creen saber más que auténticos expertos en la materia. Fue Bertrand Russell quien decía que “el problema de la humanidad es que los estúpidos están seguros de todo y los inteligentes están llenos de dudas”. ¡Y tanto! Dos psicólogos, Justin Kruger y David Dunning, estudiaron científicamente este fenóneno y mostraron lo que desde entonces se conoce como el efecto Dunning Kruger.